Caso Ryan Hammons evidencia de la reencarnación
Desde los cuatro años, Ryan Hammons comenzó a compartir recuerdos que dejarían perplejos a sus padres: describía una vida anterior en Hollywood, con detalles asombrosos y precisos sobre una existencia pasada. Su relato pronto captó la atención de investigadores de parapsicología y medios de todo el mundo.
Ryan Hammons
Un relato que desafía lo ordinario
El chico originario de Oklahoma gustaba de jugar a dirigir películas desde que tenía tres años; algo que para sus padres era una clara muestra de gran imaginación infantil y un extraordinario talento innato para el séptimo arte.
Pero empezaron las pesadillas, en las que el niño gritaba que su corazón había “explotado en Hollywood”.
Ryan y Cyndi
La madre de Ryan, Cyndi, lo escuchó decir: “Mamá, antes era otra persona”, lo que la asustó muchísimo. Ryan relataba con clareza una casa blanca con piscina, su participación en el mundo del cine y su deseo de regresar a lo que él llamaba “casa”, refiriéndose a Hollywood.
El niño se emocionaba, diciendo que era su hogar y que quería regresar allí.
Poco después, Ryan comenzó a relatar episodios precisos sobre rodajes, viajes y amigos de la industria cinematográfica. Según testimonios recogidos, llegó a mencionar más de 100 hechos específicos sobre esa supuesta vida pasada.
Continuó describiendo a sus padres escenas comunes de una vida en la meca del cine, narraba un día de playa con amigos, los coches verdes que no dejaba conducir a nadie, e incluso nombró a Marilyn Monroe.
Una vida ajetreada
Dijo que había sido agente en Hollywood y que la agencia había cambiado los nombres de las personas. Habló de bailar en Broadway. A veces, cuando escuchaba la radio, se ponía de pie y empezaba a bailar claqué.
El hallazgo del rostro buscado
Su madre intrigadísima por la curiosidad pero sobretodo por la inquietud buscó en libros antiguos de la biblioteca y en diferentes documentos algo que confirmara lo que su hijo Ryan decía.
Una tarde, ojeando junto a Ryan libros sobre la “Edad de Oro” de Hollywood, el niño detuvo la mirada en una fotografía en blanco y negro extraída de la película Night After Night (1932). Señaló directamente a un hombre en la imagen y expresó: «Mamá, ese es George, ¡hicimos una película juntos y ese era yo!»
Un investigador cinematográfico identificó al hombre como Marty Martyn, un agente de talento cuya vida coincidía con muchas de las afirmaciones de Ryan.
Confirmación y asombro
El psiquiatra infantil, investigador y profesor de psiquiatría en la Universidad de Virginia, Jim Tucker, quien ha investigado durante décadas casos de niños que aseguran recordar vidas anteriores lideró la evaluación del caso.
Según sus hallazgos, Ryan pudo haber recordado 55 detalles verificables de la vida de Marty Martyn, incluyendo datos sobre su agencia, su familia, su residencia y hasta su pasión por los rayos de sol y las gafas oscuras. Este era un actor y agente de Hollywood cuya existencia era poco conocida y apenas aparecía en registros públicos. Falleció en 1964, aproximadamente cuarenta años antes del nacimiento de Ryan.
Ryan Hammons y Marty Martyn
Entre las coincidencias destacan: la descripción de la calle donde vivía, detalles de sus viajes a París, el tipo de coche que conducía, el número de hermanas y hasta la cantidad de esposas que tuvo. Ryan incluso acertó al decir que Martyn había muerto a los 61 años, cuando muchos documentos oficiales lo registraban con 59.
Reacción del medio internacional y debate científico
El caso se viralizó siendo objeto de reportajes en documentales televisivos y medios internacionales como The Times of India que destacaron su singularidad y fomentaron el debate sobre la posibilidad de la reencarnación.
Tucker y otros científicos han recogido más de 2.500 casos similares de niños (entre 2 y 6 años) que relataban detalles de vidas pasadas. Según su base de datos, el 70 % de los casos investigados fueron «resueltos» al correlacionar los relatos con personas reales que murieron antes del nacimiento del niño estudiado.
Se trata de una evidencia de la reencarnación
Con el paso de los años, los recuerdos de Ryan han ido desvaneciéndose, lo cual coincide con el patrón observado en otros niños con relatos similares. El espiritismo explica este olvido temporal y la existencia de la reencarnación, algo que la ciencia y los investigadores empiezan a creer.
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