Evidencias científicas de la comunicabilidad de los espíritus
Vivimos en un Nuevo Mundo, donde los avances científicos nos van acercando a Dios.
Louis Pasteur lo anunció ya en su tiempo diciendo, «Un poco de ciencia nos aparta de Dios, mucha nos aproxima» (L’Âge nouveau, 1957) (Wikiquote, 2014) y Mark Planck, el padre de la física cuántica, sutilmente lo subrayó más tarde al decir que «Dios está, para el creyente, en el principio de sus discursos y, para el físico, en el término de los suyos». (Pensador, 2016)
Así pues, el espiritismo, como ciencia, ha contribuido también a esa aproximación, al investigar en al menos cinco de sus bases filosóficas más ampliamente aceptadas: Dios, espíritu, comunicación de los espíritus, reencarnación y pluralidad de mundos habitados.
Hoy, os traemos algunas evidencias científicas recientes de la línea de investigación de la comunicación de los espíritus, desde las diferentes dimensiones donde viven, basadas en la experimentación en transcomunicación instrumental (TCI), en sus distintas formas (Goldstein, 1992) (Argollo, 1994). Se constituye, en nuestro nuevo mundo, como una herramienta más para el desarrollo de la ciencia espírita, al lado de la transcomunicación mediúmnica (TCM), la única que Kardec disponía en su tiempo, en el siglo XIX, para su investigación, y que le permitió escribir la codificación básica del espiritismo (Kardec, El libro de los Espíritus, 1857) (Kardec, El libro de los médiums, 1861) (O Espiritismo de Kardec aos dias de hoje, 1995).
Pero, al mediados del siglo XX, otras formas de comunicación, por medio de aparatos electrónicos, han empezado a ser registradas…
Queremos así validar, una vez más, que el método científico, junto con las herramientas más recientes, confirma el conocimiento codificado por la ciencia espírita, lo que refuerza la credibilidad y la solidez lógica de sus postulados.
Como ciencia, debemos conseguir un ESPIRITISMO con mayúsculas y sin adjetivos, porque no los tiene, y lo que nunca se puede perder es el espíritu científico, racional, investigador y motivado, que el codificador Allan Kardec nos dejó,
tal como afirmó Mauro Barreto Rodríguez, del Grupo Espírita de La Palma, y citado por Hernani Andrade (Goldstein, 1992, p. 131)
Siguiendo el método científico tendremos que desarrollar una hipótesis que justifique estos hechos. Acordémonos de las distintas fases del método científico… (Murcia, 2016) (Quivy, 2005)
Vamos, entonces, a aplicarlo a los hechos de las comunicaciones anómalas, que dicen ser de los muertos y que se obtienen por el medio de la TCI.
¡Tenemos ya nuestra hipótesis, una creencia verdadera justificada, una afirmación filosófica, de acuerdo con Platón! (Platão, 2014) Se impone ahora validarla, sujetándola a experimentación, buscando los límites de su validez.
Voces anómalas EVP
Empecemos por las voces anómalas, en la conocida trilogía experimental de la TCI, voces, imágenes y texto, en nuestros días… (Goldstein, 1992) Han sido recogidas voces de tres formas diferentes, así que se le atribuye a cada una designación propia, basada en la forma y medios electrónicos como son encontradas:
El fenómeno de voces electrónicas (Eletronic Voice Phenomena-EVP) se observó por primera vez a principios del siglo XX, cuando aparecieron mensajes supuestamente inexplicables en telégrafos, teléfonos y en los primeros instrumentos de registro de la voz. A medida que los aparatos de telecomunicaciones han evolucionado, la idea de utilizarlos para el contacto con las almas de los que han muerto ha atraído la atención de reconocidos científicos, tales como Graham Bell, Nicola Tesla e, incluso, Thomas Edison, quien propuso la construcción de un aparato para grabar las voces de los espíritus. (Jurgenson, 1981) (Goldstein, 1992)
En 1939, Von Atila Silay, un fotógrafo experimentado, afirmó haber obtenido voces anómalas utilizando un fonógrafo y una primitiva grabadora de alambre, el predecesor de las grabadoras de cinta magnética, que grababa sonidos en bobinas de alambre muy fino.
En 1952, mientras hacían grabaciones de canto gregoriano en el hilo de alambre, dos sacerdotes italianos, Agostino Gemelli y Pelegrino Ernetti, registraron la voz del difunto padre de Gemelli, sin darse cuenta. Debido a que la comunicación con los muertos quedaba prohibida por la tradición religiosa, los dos sacerdotes pensaron que habían cometido un pecado mortal. Pero se sintieron aliviados, en gran medida, cuando el papa Pío XII declaró que la grabación constituía un importante descubrimiento y que debería impulsar más estudios para confirmar la continuidad de la vida en el más allá.
Mientras tanto, la grabadora de cinta magnética se ha ido popularizando, durante los años 50, y comenzaron a aparecer informes sobre misteriosas grabaciones de voces. Hubo cierta controversia sobre su origen y se consideraba como la causa más probable, el registro involuntario y aleatorio de emisiones de radio…
El primero que empezó a investigar el fenómeno de EVP con detalle, fue el actor, artista y director de cine sueco, Friedrich Jurgenson. En 1959, mientras usaba su grabadora de cinta magnética portátil, con objeto de grabar el sonido de los pájaros para una película documental, al reproducir la grabación, descubrió voces mezcladas con los sonidos de los pájaros. Se convenció de que eran voces de personas fallecidas y dedicó el resto de su vida a la investigación del fenómeno. Logró registrar miles de voces, en diferentes idiomas. Llegó a la conclusión que con frecuencia interactuaban con el experimentador y publicó los resultados en varios libros.
Uno de los antiguos alumnos y colaborador de Jurgenson fue el filósofo y psicólogo Konstantin Raudive. Éste, después de trabajar con Jurgenson, también se convenció de que las psicofonías eran las voces de los muertos. Raudive trabajó afanosamente para demostrar que, usando equipos sencillos, era posible para los muertos establecer comunicación con los vivos. Durante su vida grabó más de 70.000 voces en seis idiomas diferentes y publicó su primer libro sobre psicofonías, en inglés. En 1971, grabó un álbum discográfico para promover su libro. Las voces obtenidas por Raudive han atraído la atención en todo el mundo, especialmente en Europa… (Raudive, 1968)
El físico alemán Ernst Senkowski era entonces un experimentador reciente en psicofonías. Empezó en 1976 y, poco después de la segunda o tercera prueba, obtuvo voces diciendo: «Somos los muertos; estamos vivos; nosotros podemos pensar y hablar». Una de las primeras y extraordinarias voces que logró registrar, 14 días después de empezar a experimentar, fue la voz de su difunto padre… Él le habló, llamándole por el diminutivo de su nombre, “Elf”, de cuando era niño… (Senkowski, 1989)
En los Estados Unidos de América, Sara Estep, era la experimentadora líder en psicofonías. Ella obtuvo cientos de grabaciones y también publicó un libro, Voces de la Eternidad (Estep, 1988). En 1982, fundó la primera Asociación, a nivel mundial, dedicada a la investigación en psicofonías, que hoy es conocida como Asociación de Transcomunicación (ATC).
Nuestros primeros experimentos en psicofonías los hicimos con Anabela Cardoso, una investigadora portuguesa con proyección mundial, que incluso publica una revista sobre el tema Cuadernos de TCI y publica su investigación (Cardoso, 2010) en su propio sitio en internet (Cardoso, Instrumental Transcommunication, 2016) y en otros, como, por ejemplo, en Neuroquantology (NeuroQuantology, 2016).
Voces directas de radio DRV
Con el desarrollo de la EVP, algunos de los investigadores más regulares y dedicados en psicofonía han logrado obtener comunicaciones más interactivas, en tiempo real, por medio de receptoras de radio.
A lo largo de varios años Anabela Cardoso viene investigando en EVP con éxito en España, donde vive. En 1998, durante una sesión de psicofonía, ella estaba usando una radio vieja para obtener ruido blanco para su experimentación cuando, inesperadamente, salió de la radio una contestación a un comentario suyo hablado en portugués, su idioma materno. Anabela Cardoso dice que, a menudo, estas voces le llamaban por su nombre de niña, «Bela». Puesto que estas voces salen directamente de receptoras de radio, a lo mejor podrían ser emisiones de cadenas de radio, ¿o no? A esta pregunta, ella contestó:
… emisiones de cadenas de radio no te contestan directamente a preguntas personales como, ¿Quién está hablando? ¡Emisiones de cadenas de radio no te contestarán! “¡Es tu hermano Luís!» (Cardoso, Electronic Voices, 2010)
Marcello Bacci, un italiano de Grosetto, en Italia, es el experimentador de VDR más conocido a nivel mundial. Desde 1940, Bacci viene registrando voces de fallecidos, por medio de sus viejas receptoras de radio, todavía con válvulas de vacío. Más de 60 años después, sus receptoras continúan produciendo una gran cantidad de voces, en diferentes idiomas, que miles de personas han confirmado ser de sus fallecidos y logran establecer comunicación con ellos en los dos sentidos. Bacci nunca ha aceptado ninguna forma de pago o regalo por sus servicios.
Científicos e investigadores de varios países han estudiado estos fenómenos, como por ejemplo el Ingeniero Paolo Presi y sus compañeros de «Il laboratorio» (Italia), que lo han investigado desde 1974. Hasta hoy, nunca han descubierto ninguna evidencia de fraude. A pesar de varias décadas de investigación con muchísimas evidencias, algunos escépticos insisten en que las voces pueden ser producidas en un lugar remoto y transmitidas por radio. Pero, repetidos análisis científicos lo han denegado, una y otra vez, confirmando su naturaleza extremadamente anómala y que no tienen origen en ningún aparato vocal humano (Bacci, 1985).
En 2004, un grupo de investigadores de la vida en el más allá, que incluía a Anabela Cardoso, al profesor David Fontana, a Robin Foy y al físico Mario Festa, se han unido a Paolo Presi, para un experimento en el centro de investigación de Bacci, en Grosseto. Al inicio, las voces salían de la receptora de radio de Bacci en italiano. Entonces Bacci recordó el idioma más común de sus invitados, el inglés, y las voces empezaron a hablar en ese idioma. Las voces dijeron, en su momento, algo muy curioso “El hombre no debe nunca dar por sentado que logrará hacer todo lo que la tecnología y la ciencia le permita” (Cardoso, Festa, Fontana, & Presi, 2004).
La comunicación a través del teléfono
Otra forma de comunicación por voz, con el más allá, es el teléfono. Hasta ahora menos común que las otras dos formas que hemos visto, pero, aún así, produce fuertes evidencias, como vamos a ver.
En los años 70, del siglo pasado, dos conocidos parapsicólogos, Scott Rogo y Raymond Bayless, contestaron a esta pregunta, tras investigar muchos casos en los EEUU. Concluyeron que las llamadas «fantasma», además de reales, solían ocurrir con sorprendente frecuencia y estimaron que, solo en los EEUU, cientos de ellas eran recibidas cada año. Tal y como en otras formas de TCI la gente confirmaba que las voces que escuchaban eran las de familiares y amigos fallecidos (Rogo & Bayles, 1979).
Muchos investigadores de TCI coinciden en la idea de considerar a Konstantin Raudive el campeón de mensajes enviados desde el más allá. Como ya dijimos, Raudive era, mientras vivía en nuestra dimensión física, un filósofo, psicólogo, profesor y autor, que hablaba una media docena de idiomas y que murió en 1974. Se estima que cientos de personas habían recibido psicofonías (EVP) de Raudive y también que habló docenas de veces, por medio de radio (VDR) y teléfono.
Una mañana, en la primavera de 1992, Mark Macy recibió su primera llamada desde el más allá y era de Konstantin Raudive. Se estaba preparando para conducir un experimento de TCI envolviendo frecuencias de radio muy bajas, cuando el teléfono sonó. De acuerdo con Macy, del otro lado de la línea, la voz se presentó como Raudive y le dio sugerencias para su experimento. No tenía cómo grabar las voces en ese momento, pero se preparó para la siguiente oportunidad que ocurriese. La siguiente vez que el teléfono sonó, recibió de Raudive el siguiente mensaje:
I’ll try to make it clearer this time. It’s a VLF receiving converter. You simply connect VLF converter to your HF radio’s antenna input and a suitable VLF antenna…
La conversación duró varios minutos. La voz del emisor era muy clara y las sugerencias técnicamente sofisticadas y eficaces. (Macy, 2016)
Estas conversaciones no se han limitado a indicaciones técnicas. A menudo hablaban de temas sociales y, de acuerdo con Macy, los puntos de vista expresados por medio de la TCI le han parecido muy serios y capaces de conducirnos a un mundo más justo y pacífico. Por ejemplo, este mensaje:
You know how dangerous drugs of all kinds can be… Violence. That’s one of those things we want to prevent by ITC. The violence…” (Mediumship, 2014)
Imágenes anómalas en vídeo y fotografía
Vamos ahora a mirar las dos formas más comunes de recogida de imágenes anómalas, vídeo y fotografía.
En los años cincuenta del siglo pasado, cuando la fotografía electrónica en forma de televisión se popularizó, Friedrich Jurgenson, el pionero en las psicofonías (EVP) fue uno de los primeros en reconocer su potencial de comunicación con los fallecidos y previó que imágenes del más allá pronto aparecerían en aparatos de televisión. Jurgenson pasó los últimos años de su vida en la ciudad de Hoor, al Sur de Suecia y murió en octubre de 1987. Justo en el momento de su funeral, sus amigos Claude y Ellen Thorlin, que vivían en una ciudad al norte, cerca de Estocolmo, y a 300 km de distancia, presenciaron un fenómeno extraño.
Ellen, que era un médium auditiva, dijo que escuchó una voz interior diciéndole que encendiera la televisión, en el canal 4, uno de los libres. Lo hizo y de pronto la pantalla se quedó negra; pasado algún tiempo, un punto de luz apareció y evolucionó hasta que apareció un rostro. Como cumpliendo su propia predicción, Jurgenson aparentemente proyectó su cara en la pantalla de la televisión de sus amigos, que ellos registraron en su cámara Polaroid.
Pero Jurgenson no había sido el primero en producir imágenes de fallecidos en televisión. Ese honor es muy probablemente debido a Klaus Schreiber, de Aachen, Alemania. En 1982 empezó a investigar sobre psicofonías (EVP). En uno de los mensajes que recibió, de familiares fallecidos, le decían que intentara la grabación en vídeo. Hoy, la grabación vídeo es muy sencilla y fácil, pero en los años 70 y 80 eran necesarios equipos pesados y complejos de cintas magnéticas.
Profesionalmente Klaus había estudiado técnicas para combatir el fuego, pues era bombero, pero no conocía bien esta tecnología de grabación. Sus primeros experimentos no tuvieron éxito… Siguiendo recomendaciones recibidas en psicofonías y con el apoyo del ingeniero electrotécnico Martin Wenzel, Klaus construyó un circuito retroalimentado de vídeo, con cámara y TV, que producía formas muy inestables en la pantalla, que le dijeron que podrían ser manipuladas por los comunicadores en el más allá.
En 1984, su perseverancia produjo resultados y empezó a recibir muchas imágenes interesantes. Avanzando la grabación de vídeo de cuadro en cuadro (frames), Schreiber logró aislar y estudiar cada imagen o secuencias cortas, en que las imágenes habían evolucionado de formas aleatorias. Como no tenía medios técnicos para hacer la edición en vídeo decidió regrabar las imágenes obtenidas en otra cinta, para preservarlas (Goldstein, 1992).
Ningún resumen sobre la TCI estaría completo sin hablar de Robbert van den Broeke que vive en Hoeven, en Holanda. Cuando fuimos a visitar Robbert, en febrero de 2014, llevamos dos cámaras de vídeo para testar y registrar sus talentos. La más pequeña, la pusimos en un trípode para registrar la totalidad del escenario y la principal la usamos al hombro, para detalles. Para evitar cualquier posibilidad de grabación previa o sustitución, hemos traído nuestra propia cámara digital, que no tiene memoria incorporada, y hemos usado una tarjeta de memoria cuya línea de fabricación se cerró hace más de 5 años.
Hemos numerado cada tarjeta y apagamos cada una frente a las cámaras de vídeo, antes de cada experimento. En todos los experimentos, Robert se ha quedado delante del telón oscuro en su sala de estar, más o menos en esta posición. Al final de cada experimento nos ha entregado la cámara y la hemos puesto sobre esta mesa. Hemos descargado las fotos a un ordenador protegido con contraseña. La cámara, el ordenador y las tarjetas se han quedado siempre visibles para nosotros. Vamos a ver algunas de las imágenes que han aparecido… En una de ellas apareció el contorno de un rostro y algo que parecía un haz de luz.
En esta, una espiral de energía rara termina en lo que parece ser una mano humana.
Lo más intrigante de todo, fueron dos imágenes borrosas que parecían ser de Friederich Jurgenson en sus últimos años de vida
Hacemos también alguna investigación en imágenes, pero en cooperación con una de las investigadoras con más proyección en la península ibérica y en el mundo, Marián Casademont, que vive en Catalunya y publica su propia investigación en su sitio en internet (Casademont, 2016)
Mensajes del más allá en el ordenador
Otra forma de recogida de mensajes del más allá ha sido texto en el ordenador.
En octubre de 1995 un compañero de Luxemburgo envió al investigador Mark Macy un mensaje, de un largo conjunto, que había recibido en su ordenador personal. Tal y como ocurrió con las grabadoras de cintas magnéticas personales, en los años 50, con la llegada del ordenador personal en los años 80 y 90 han aparecido relatos de recepción de mensajes anómalos sin origen ni explicación conocidas, a menudo en ordenadores sin conexión con una red.
Este mensaje, destinado al propio Mark y a uno de sus colaboradores, indicaba que su autor era un desconocido periodista, Arthur Beckwith, que había nacido en Inglaterra, en 1832, se casó en Jamaica en 1857, y fue a vivir en Nueva York, en el barrio de Brooklyn. Murió en la misma fecha del hundimiento del buque de crucero Titanic, en el año de 1912. Mark contrató un detective privado, en Inglaterra, para allí descubrir informaciones sobre Beckwith y se confirmó su nacimiento en 1832.
Además, Arthur decía en su carta que había trabajado para los periódicos Sun, Brooklyn Daily Eagle y Citizen. Mark decidió entonces buscar información en la biblioteca pública de Brooklyn y confirmó que Arthur Beckwith había sido empleado de esos periódicos y descubrió también su obituario. Un compañero suyo acudió al Archivo Nacional, en Wahsington DC, para confirmar también, tal como decía en su carta, que en 1900 Arthur Beckwith era viudo, tenía 68 años y vivía en el número 150, de una calle de Brooklyn.
Arthur mencionaba también el nombre de un hombre, Bill H. Lynch, que había sido párroco en una iglesia católica, de una ciudad en el estado vecino de Nueva Jersey. Mark y su compañero fueron entonces a visitar esa iglesia y descubrieron documentos que confirmaban que ese hombre había sido párroco en esas fechas…
Conclusiones
La evidencia parece apoyar nuestra teoría. Aún así, ni la filosofía ni la ciencia trabajan con la verdad, sino con el conocimiento. El espiritismo, como filosofía de bases científicas lo hace igualmente, así que busca, en permanencia, usar la teoría que compone su codificación, para entender mejor el universo y está permanentemente listo para mejorarla, para explicar nuevas evidencias que se presenten.
Hasta el momento, las otras hipótesis más comunes de justificación de los mismos hechos, que hemos presentado, son estas que se presentan arriba y, enseguida, las razones por las que la ciencia espírita las rechaza.
Y esta es la explicación de la ciencia espírita (Kardec, El libro de los Espíritus, 1857) (Kardec, La Génesis, 1861) (Greene, 2007) (Zohar, 1990) (Vieira, 2016):
Así que, en estos momentos, basados en las evidencias y con las justificaciones que hemos elaborado, nos sentimos bastante seguros con nuestra teoría sobre la comunicabilidad de los espíritus:
Aceptar nuevas verdades exige humildad y espíritu científico. Raudive, en una de sus comunicaciones, desde el más allá, dijo:
Las ciencias son escépticas, así como la mayoría de las personas en la calle. Todos han sido educados para tener una visión materialista del mundo. Esto es común: nuevas ideas sólo son aceptadas por la mayoría de las personas si se las reconocen como adecuadas a la imagen que tienen del mundo. Nuestra tarea es ampliar esa imagen y lograr construir una nueva, que incluya nuevas verdades… (Senkowski, 1989)
Y, en una anticipación de lo que nos puede reservar el futuro, en este Nuevo Mundo que cada nuevo día vamos descubriendo, Hernani Guimarães de Andrade, bajo el seudónimo de Goldstein escribió:
… poseeremos en el futuro, en cada hogar, un equipo para la transcomunicación verbal y visual, por medio del cual podremos comunicarnos con aquellos a los que amamos y que nos han precedido en el paso hacia el Plan Espiritual… (Goldstein, 1992)
¡Gracias a todos!
João Gonçalves
Acceso a la conferencia en el I Congreso ConCiencia:
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