Plano interactivo de Allan Kardec en París
Presentamos un recorrido histórico por París, visitando los lugares ligados a Allan Kardec. Este plano interactivo de Allan Kardec en París tiene dos recorridos. Por un lado, el plano interactivo que lleva aparejadas vistas del París antiguo. Y por otro, a continuación ofrecemos una breve descripción de los hechos históricos ligados a esos lugares, con fotografías actuales. Invitamos al lector a viajar en el tiempo y a conocer los albores del espiritismo en el siglo XIX. Caminamos de la mano del joven pedagogo Hippolyte Léon Denizard Rivail, primero. Y seguidamente de Allan Kardec, seudónimo de Rivail, quien emprendió la tarea de recopilar, analizar y publicar las informaciones obtenidas de los espíritus, dando lugar a una nueva ciencia de observación y filosofía de vida: el espiritismo.
Plano interactivo de Allan Kardec en París
Hippolyte-Léon-Denizard Rivail había nacido el 3 octubre de 1804 en Lyon, en una familia de juristas. Asistió a la escuela primaria en su ciudad natal durante sus primeros años, pero su familia decidió enviarlo a estudiar a Suiza con objeto de alejarlo de la convulsa Francia napoleónica. Estudió en el instituto pedagógico situado en el castillo de Yverdon, en Suiza, fundado por el renovador de la pedagogía moderna Johann Heinrich Pestalozzi. Dicho centro estaba inspirado en los principios expuestos por Rousseau en su obra Emilio o la educación.
Inmerso en un ambiente de estudio y afectividad, en el que convivían jóvenes de diversos países, el muchacho Rivail aprendió a dominar otras lenguas, como el inglés, el alemán y el holandés. Son años de intensa formación que marcarán vivamente su vida y obra. Bachiller en letras y en ciencias, exento del servicio militar, y tras su etapa en Suiza, se estableció en París.
Recorrido por el París del profesor Hippolyte-Léon-Denizard Rivail
117, RUE DE LA HARPE
Desde 1822 o 1823 el joven Rivail, vive en el corazón del Quartier Latin, seguramente con sus padres. El lugar no podía ser más oportuno, el barrio de los estudiantes, donde se encuentra la Sorbonne, universidad de París, y las escuelas superiores. En la capital cultural del mundo, con unos 18 años, inicia su labor pedagógica con la publicación de su primera obra: Cours pratique et théorique d’arithmetique, d’après la méthode de Pestalozzi aves des modifications, par H-L-D Rivail disciple de Pestalozzi (1824). Dicha obra se componía de dos folletos impresos que nos informan del domicilio de su autor. Podía adquirirse a través de una suscripción de 6 francos en la calle Harpe.
A esta primera obra pedagógica siguieron muchas otras que demuestran las excepcionales cualidades del joven Rivail para la renovación de la enseñanza en Francia.
35, RUE DE SÈVRES
Tras haber creado una Escuela de Enseñanza Primaria, en 1826 con solo 22 años, Denizard crea el Instituto Técnico Rivail. Se trataba de un centro de enseñanza que seguía la estela del instituto de Yverdun. Son años en los que prosigue su labor publicando diversas obras pedagógicas: Plan proposé pour l’améliorement de l’instruction publique (1828), Cours pratique et théorique d’arithmétique (1829), Grammaire française clasique sur un nouveau plan (1831), Manuel des examens pour les brevets de capacité (1846), etc. A través de ellas se revela como un digno sucesor de Pestalozzi y su compromiso social.
En el Instituto Rivail también impartía clases la profesora Amélie Gabrielle Boudet, con quien Denizard se casó en 1832. Ya en 1849 encontramos a nuestro autor como profesor del Lycée Polymathique, donde impartía cursos de fisiología, astronomía, química y física. También publica Dictées normales dels examens de l’Hôtel de Ville et de la Sorbonne, Dictées especiales sur les dificultes orthographiques… Se trata de manuales pedagógicos con gran éxito en París.
18, RUE DE LA GRANGE BATELIÈRE
En 1854 Rivail escuchó hablar por primera vez al magnetizador Fortier de las mesas giratorias. Este le decía: «Lo más extraordinario no es solo que gire una mesa magnetizándola, sino que se le haga hablar, se le pregunte y responda». A lo que Rivail, haciendo gala de su carácter serio, replicó:
Creeré cuando lo vea y cuando me hayan probado que una mesa tiene un cerebro para pensar, nervios para sentir y que puede llegar a ser sonámbula. Hasta entonces, permítame no ver en ello más que un cuento inverosímil. (H. Sausse)
A principios de 1855 Rivail se encontró con Carlotti, un antiguo amigo que le habló con entusiasmo de los fenómenos. Denizard estimaba las cualidades de una hermosa alma, pero desconfiaba de su exaltación. Un martes del mes de mayo de 1855, a las 8 de la tarde, el profesor Rivail fue invitado a la casa la Sra. Plainemaison, en la calle Grange-Batelière. Allí asistió por primera vez al fenómeno de las mesas giratorias, que saltaban y corrían de tal modo que la duda no era posible. Observó las respuestas inteligentes a través de golpes y verificó una rudimentaria escritura mediúmnica en una pizarra a través de una cestita:
Vi también algunos ensayos muy imperfectos de escritura mediúmnica sobre una pizarra con la ayuda de una cestita. Mis ideas estaban lejos de ser detenidas, pero había aquí un hecho que debía tener una causa. Entreví bajo estas futilidades aparentes y la especie de juego que se hacía con estos fenómenos, algo serio y como la revelación de una nueva ley que me prometí profundizar. (H. Sausse)
7, RUE ROCHECHOUART
En casa de la Sra. Plainemaison, el profesor Rivail conoció al Sr. Boudin, quien lo invitó a las sesiones semanales que tenían lugar en su casa en la calle Rochechouart. Fue muy asiduo a ellas, en las que participaban las jóvenes hijas de Boudin, Caroline y Julie, como intermediarias. Sobre estas reuniones nos informa Kardec:
Es allí que hice mis primeros estudios serios sobre Espiritismo, menos aún por revelaciones que por observaciones. Aplicaba a esta nueva ciencia, como había hecho hasta entonces, el método de la experimentación. No tuve nunca teorías preconcebidas. Observaba atentamente, comparaba y deducía las consecuencias. De los efectos buscaba remontarme a las causas a través de la deducción, el encadenamiento lógico de los hechos, no admitiendo una explicación como válida hasta que ella pudiese resolver todas las dificultades de la cuestión. Es así como había procedido en mis trabajos anteriores desde la edad de quince o dieciséis años.
Comprendí enseguida la gravedad de la exploración que iba a emprender. Entreví en estos fenómenos la clave de un problema tan oscuro y tan controvertido del pasado y del futuro de la humanidad, la solución que había buscado toda mi vida. Era, en una palabra, toda una revolución en las ideas y en las creencias. Era necesario actuar con circunspección y no con ligereza; ser positivista y no idealista, para no dejarse llevar por las ilusiones. (H. Sausse)
14, RUE TIQUETONNE
En la casa de Roustan tenían lugar reuniones en las que participaba la médium Japhet, que obtenía interesantes comunicaciones. El 30 de abril de 1856 Allan Kardec recibió la revelación de la misión que tenía encomendada, que fue más tarde precisada a través de diversos médiums en comunicaciones espontáneas obtenidas en ausencia de Kardec. El trabajo tuvo lugar en sesiones ordinarias, pero por consejo espiritual fue seguido de otras especiales, para mayor control de las comunicaciones.
Yo no me contentaba con esta verificación -decía todavía Allan Kardec-, que me habían recomendado los espíritus. Las circunstancias me habían puesto en comunicación con otros médiums y cada vez que la ocasión se presentaba la aprovechaba para proponer algunas de las cuestiones que me parecían más espinosas. Es así que más de diez médiums prestaron su asistencia a este trabajo. De la comparación y de la fusión de todas estas respuestas, coordinadas, clasificadas y diversas veces rehechas en el silencio de la meditación, que formé la primera edición de El Libro de los Espíritus, que apareció el 18 de abril de 1857. (H. Sausse)
Este aspecto científico del espiritismo inicial de someter a diversos sujetos que no se conocen entre sí, las mismas cuestiones, se conoce con el nombre de «control universal«.
Recorrido por el París de Allan Kardec
PALAIS ROYAL DE PARIS
El 18 de abril de 1857 se presentó El Libro de los Espíritus en la Librería Dentu, en la Galería de Orleans situada en los jardines del Palais-Cardinal, más tarde conocido como Palais-Royal al ser habitado por la reina regente Ana de Austria durante la minoría de edad de Luis XIV y a continuación por la Casa de Orleans. Luis Felipe de Orleans, conocido como «Felipe Igualdad», abrió los jardines al público y sufragó la construcción de las galerías neoclásicas en 1786-1790 para contener locales comerciales. La primera edición de El Libro de los Espíritus presentada en este lugar emblemático de Francia constaba de 501 preguntas, ampliadas a 1018 en la segunda.
El Palacio Real también albergó la Société Parisienne d’Études Spirites, fundada el 1 de abril de 1858, que se reunía todos los martes en un local de la Galería de Valois. Aquí estuvo ubicada un año, hasta el 1 de abril de 1859. No pudiendo permanecer en este local por más tiempo, se reunía todos los viernes en un salón del restaurante Douix, situado en la Galería Montpensier hasta el 1 de abril de 1860, época en la que se instaló en un local propio en la calle y pasaje Santa Ana, 59.
8, RUE DES MARTIRS – CASA DE ALLAN KARDEC
El matrimonio Rivail vivía en el segundo piso, al fondo del patio de este edificio. Aquí tenían lugar las reuniones en las que participaba Ermance Dufaux como médium principal. Su salón podía albergar de 15 a 20 personas, e incluso muchas veces más de 30. Al necesitar más espacio y para no sobrecargar a los anfitriones, algunos de los asistentes propusieron la formación de una sociedad espírita y alquilar un local donde tendrían lugar las reuniones. Así nació la Société Parisienne d’Études Spirites, creada el 1 de abril de 1858, cuya primera sede fue un local del Palais Royal de París.
La dedicación de Allan Kardec al estudio de estos hechos revolucionarios es completa. Tal como relata P. G Leymaire, se levanta a las 4,30 de la mañana, en todas las estaciones, escribe para hacer frente a la correspondencia, a sus nuevos trabajos, a las recepciones, a las sesiones del viernes, pero también es blanco de ataques furibundos y traiciones:
Las cartas anónimas, las traiciones, los insultos y la denigración sistemática perseguían a este trabajador, a este genio bienhechor, y le hacían heridas morales incurables. (H. Sausse)
59, PASSAGE SAINTE ANNE – SEDE DE LA REVUE SPIRITE
El primer número de la Revue Spirite vio la luz el 1 de enero de 1858, completamente redactado y sufragado por Allan Kardec. No tenía ni un solo abonado y lo realizó en solitario, pero supuso un éxito que sobrepasó cualquier expectativa. Los números se sucedieron sin interrupción cada mes durante once años y la Revista se erigió en un poderoso auxiliar divulgativo.
En 1860 se trasladó a esta dirección la Société Parisienne d’Études Spirites en la que permaneció hasta 1869. Precisamente cuando Kardec estaba preparando el traslado de la Sociedad, que debía producirse el 1 abril a una nueva dirección en el nº 7 de la rue de Lille, le sobrevino la muerte material. El arrendamiento en el pasaje Sainte Anne estaba a punto de expirar y el profesor Kardec pensaba retirarse a vivir a la villa Ségur. Allí podría trabajar más activamente en las obras que le restaban por escribir, cuyo plan y documentos había ya reunido.
Estaba realizando los preparativos para el cambio de domicilio cuando el 31 de marzo de 1869, a los 65 años, murió por un causa de un aneurisma. Sin embargo, ya tenía preparado el número de la revista correspondiente al mes de abril, que contenía el ultimo opúsculo firmado por el maestro: Catalogue raisonné pouvant servir à fonder une bibliothèque spirite.
AVÉNUE SÉGUR – VILLA SÉGUR
Allan Kardec había comprado un terreno de 2666 m² en la avenida de Ségur, detrás del complejo del Hospital de los Inválidos creado por Luis XIV para dar cobijo a los veteranos de guerra sin hogar. Allí deseaba construir seis casitas con su jardín, albergando la dulce esperanza de retirarse a una de ellas, la villa Ségur. También pensaba construir una casa de retiro donde podrían refugiarse durante su vejez los defensores del espiritismo que no tuvieran hogar.
Narra Pierre-Gaëtan Leymaire que Kardec todos los domingos, especialmente en los últimos días de su vida, invitaba a algunos amigos a comer en la villa Ségur. Allí, tras conversar sobre los temas más controvertidos, se las ingeniaba para distraer a sus amigos, haciendo gala de su carácter de bonhomía. La villa Ségur fue el hogar donde vivió su viuda Amélie Boudet hasta su muerte en 1883.
CIMETIÈRE PÈRE LACHAISE
Allan Kardec fue enterrado en 1869 en el cementerio de Montmartre, pero un año más tarde fue trasladado al Père Lachaise. Su tumba, un dolmen céltico, está presidido por la siguiente inscripción: «Nacer, morir, renacer de nuevo, progresar sin cesar, tal es la ley.» Se trata de un recuerdo al nombre de Allan Kardec, seudónimo adoptado por Rivail para diferenciar las obras que había publicado como pedagogo de las obras recibidas a través de los espíritus por intermedio de numerosos médiums. Rivail fue informado por los espíritus que en otra vida había sido un monje druida llamado Allan Kardec, por lo que adoptó este nombre como seudónimo.
Merece destacarse el discurso proferido por Camille Flammarion durante el sepelio de Kardec. El célebre astrónomo, en un cálido tributo a su admirado amigo, dijo de él que era «el buen sentido encarnado». La tumba de Kardec en el Père Lachaise, donde también fue enterrada su esposa, es una de las más floridas y visitadas del cementerio. Actualmente sigue recibiendo numerosas visitas cada día por su servicio a la humanidad, pues El libro de los Espíritus ha salvado cientos de vidas.
8, RUE COPERNIC
En 1923 Jean Meyer fundó la Casa de los Espíritas, un museo que albergaba en sus archivos numerosos documentos de Allan Kardec y de otros ilustres espíritas franceses. Gran parte de esta documentación desapareció confiscada por los nazis con motivo de la ocupación durante la Segunda Guerra Mundial.
Plano interactivo de Allan Kardec en París.
Fuentes:
Gráficas: GoogleMaps, Gallica, Bibliothèque municipale de Lyon, Wikipedia, Lola Garcia.
Textuales: Para las citas de Allan Kardec, véase: SAUSSE, H. Biographie d’Allan Kardec (1896)
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