Espiritismo y Arte
Todas las realizaciones humanas son el resultado de una idea inicial. Fugaz o no, este pensamiento tuvo una génesis proveniente del ser pensante o sea del espíritu. El el bien o el mal, lo estético o lo anti-estético nacieron de la fuente mental o energía creadora que los produjo.
El entendimiento del mundo no se expresa sólo en conceptos definidos por una ciencia aún en pañales, fórmulas matemáticas, teorías imprecisas.
La percepción es el conjunto de actividades y procesos relacionadas con la estimulación que alcanza a los sentidos, mediante los cuales obtenemos información respecto a nuestro entorno y las acciones que realizamos en él y nuestros propios estados internos, entonces la percepción es la ideoplastia que se forma con la ayuda de la experiencia y necesidades. Es de carácter personal, selectiva y eventual.
Existe otra forma de percibir la organización Universal, que es más intuitiva, inmediata y sensorial. Se manifiesta por medio de la percepción de lo bello y de la experiencia estética, cuya principal expresión es el arte.
La palabra arte puede tener varios significados: «conjunto de preceptos y reglas para hacer bien cualquier cosa.” o «actividad creadora del espíritu humano (…) que busca representar las experiencias individuales o colectivas y expresar lo indecible por lo sensible. Designa en especial las bellas artes, contraponiéndose a la industria y la ciencia.”
A través del arte, las sociedades recorren un camino cultural que intenta aproximarse a la eternidad y a Dios, buscando un desarrollo crítico.
Son básicamente tres los conceptos que sobresalen en el estudio general del arte: belleza y estética y sentimiento.
Sentimiento:
El vehículo principal de expresión del arte es el sentimiento que retrata emociones positivas o negativas para ser contempladas. El artista es el que posee la capacidad de racionalizar el sentimiento y su manifestación artística representa la experiencia interior.
Desde el Homo neanderthalensis se deduce que los homínidos ya realizaban gestos rítmicos para comunicarse expresando con sus ritos prehistóricos miedo o alegría, usaban la sangre de animales, carbón, barro y otros materiales para realizar las pinturas rupestres, ilustrando de este modo su rutina diaria.
Surge de ello las primeras formas de grafismos que evolucionan en el sentido del desarrollo de un lenguaje icónico y simbólico dando origen muchos siglos más tarde a las artes visuales y la literatura.
En la Grecia el arte evolucionó por medio de las esculturas, grandes monumentos y la retorica.
En la Edad Media el arte se restringe a fines religiosos, es el arte cristiano sustituyendo el arte pagano. El arte es un componente de la cultura y siempre acompañó la Humanidad en todas sus fases. Su definición es abierta, subjetiva y se expresa por medio de la arquitectura, la escultura, las artes visuales, que incluyen la pintura y el dibujo. La música, la literatura, que incluye la poesía, además de las artes escénicas, que incluyen el teatro, la danza, el mimo y el circo.
Estética:
La palabra estética que es originaria del griego aisthetiké, significa sensación o sensibilidad, su estudio corresponde a la rama de la filosofía que estudia la esencia y la percepción de la belleza representando todo aquello que puede ser percibido por los sentidos. Como ciencia de lo bello, trata del conocimiento obtenido por los sentimientos y este sentimiento difiere de la lógica y de las ciencias exactas, ya ambas están relacionadas con la razón y no a las emociones.
El poeta, dramaturgo, filósofo e historiador alemán, Johann Christoph Friedrich Schiller propuso la educación estética como forma de armonizar y perfeccionar el mundo, y por este medio la Humanidad podría alcanzar su verdadera libertad.
Belleza:
El concepto de belleza suele ser asociado al de bueno. El filósofo Sócrates, afirmaba que lo que es bello es bueno. otro filósofo Aristóteles afirmaba que el arte de imitar hace parte del propio hombre.
Albert Einstein físico alemán de renombre que sedimentó las bases de la física estadística, de la mecánica cuántica, el efecto fotoeléctrico, el movimiento browniano y presentó la teoría de la relatividad general, por lo tanto un hombre de ciencias afirmó: “La belleza reside en el corazón de quien la contempla”.
A propósito Allan Kardec manifestó:
«Se dice, desde hace mucho, que el semblante es el espejo del alma. Esta verdad, que se tornó axioma, explica el hecho vulgar de desaparecer ciertas fealdades bajo el reflejo de las cualidades morales del espíritu y el de, muy a menudo, referirse a una persona fea, dotada de eminentes cualidades, a otra que apenas posee la belleza plástica. Es que semejante fealdad consiste únicamente en irregularidades de la forma, pero sin excluir la finura de los trazos, necesaria a la expresión de los sentimientos delicados.”
Encontramos esta cuestión en el libro Obras Póstumas, en el capítulo titulado Teoría de la Belleza:
«¿La belleza es cosa convencional y relativa a cada tipo? Lo que constituye la belleza en ciertos pueblos, ¿no es para otros una horrible fealdad? Los negros se encuentran más bellos que los blancos y viceversa. En este conflicto de gustos, ¿hay una belleza absoluta y en que consiste? ¿Somos, efectivamente, mas bellos que los hotentotes y los cafres? ¿Y por qué? Esta cuestión, que, en el primer momento, parece extraña al objeto de nuestros estudios, se relaciona, sin embargo, con él de un modo directo y con el mismo porvenir de la humanidad. Ella y su solución nos ha sido sugerida por el pasaje siguiente de un libro muy interesante e instructivo titulado: Las revoluciones inevitables en el globo y en la humanidad, por Carlos Richard.»
El autor combate la opinión de la degeneración física del hombre a partir de los tiempos primitivos. Pasando a la belleza de las formas, se expresa así en las páginas 41 y siguientes:
«No siempre un bello cuerpo físico está relacionado a un espíritu bueno o culto.»Cicerone, el orador brillante, escritor espiritual y profundo, que dejó tan grande recuerdo de su pasaje por este mundo, tiene un rostro agachapado y vulgar, que ciertamente era mucho menos agradable verlo que oírlo.”
Resulta de estas juiciosas observaciones, que el cuerpo se ha modificado en un sentido determinado y siguiendo una ley, a medida que el ser moral se ha desarrollado; que la forma exterior se halla en relación constante con el instinto y los apetitos del ser moral; que cuanto más se aproximan estos a la animalidad, más se le aproxima igualmente la forma, y en fin, que a medida que se purifican los instinto materiales, y hacen lugar a los sentimientos morales, la envoltura externa, que no esta ya destinada a la satisfacción de las necesidades groseras, reviste formas menos pesadas, más delicadas, en armonía con la elevación y la delicadeza de los pensamientos.
La perfección de la forma es de este modo consecuencia de la del espíritu; de donde puede concluirse que el ideal de la forma debe ser la que revisten los espíritus en estado de pureza, la que imaginan los poetas y los verdaderos artistas, porque penetran, por medio del pensamiento, en los mundos superiores. Considera que las manifestaciones artísticas son tanto más groseras, rudas, conteniendo características de fealdad, cuanto menor fue el sentido moral del artista.
De lo que precede puede deducirse que la belleza real consiste en la forma que se aleja más de la animalidad y refleja mejor la superioridad intelectual y moral del espíritu, que es el ser principal. Influyendo lo moral en lo físico, que apropia a sus necesidades físicas y morales, se sigue:
1) que el tipo de la belleza consiste en la forma mas propia para la expresión de las más altas cualidades morales, e intelectuales;
2) que a medida que el hombre se eleve moralmente, su envoltura se aproximará al ideal de la belleza, que es la angélica.
Concepto de belleza en el espiritismo:
Allan Kardec amplió el concepto de bello delineado por la Filosofía, al considerar las adquisiciones morales e intelectuales la verdadera belleza, legítimas conquistas del espíritu a lo largo de su evolución.
Mensajes psicografados:
El espíritu Johann Caspar Lavater en el mensaje psicografiado registrado también en Obras Póstumas, explica que:
«La belleza, desde el punto de vista puramente humano, es una cuestión muy discutible y muy discutida (…). También entra en línea de cuenta y gusto de cada uno, en las apreciaciones que hacen.”
En otro mensaje mediúmnico contenido en la obra citada, el espíritu Pamfilo esclarece que:
«El origen primero de toda bondad e inteligencia es también el de toda belleza. El amor, que en si mismo es la perfección, engendra la perfección de todas las cosas.
El espíritu está llamado a conseguirla, pues es su esencia y su destino. Debe, por medio de su trabajo, acercarse a esa soberana inteligencia y a esa bondad infinita, y debe, pues, también revestirse más y más, de la forma perfecta que caracteriza a los seres perfectos.»
Añade, además:
«El espíritu tiene como deber adquirir esa perfección, que es su esencia y su destino. Él tiene que aproximarse, por su trabajo, a la inteligencia soberana y a la bondad infinita; tiene, pues, también que revestir la forma cada vez más perfecta, que caracteriza a los seres perfectos.”
El apóstol del espiritismo:
El apóstol del espiritismo León Denis afirmó, “El arte es la búsqueda, el estudio, la manifestación de esa belleza eterna, de la cual, aquí en la Tierra, no percibimos sino un reflejo”
Para muchos es todavía una incógnita la relación existente entre el arte y la mediumnidad, los espíritus influencian a los artistas dándoles inspiración.
Los artistas generalmente presentan características peculiares de la personalidad, que los hacen diferentes de las personalidades corrientes. Algunas veces son clasificados como personas psíquicamente inestables o de difícil convivencia, consideradas exóticas.
Los que se destacan magnánimamente por buscar la excelencia en sus manifestaciones artísticas son catalogados como genios virtuosos.
Incluso los artistas que no entran en esta clasificación presentan trazos de personalidad que los diferencian, como la creatividad acentuada, la intuición más desarrollada, la flexibilidad cognitiva, el pensamiento independiente, la persistencia, la espontaneidad en sus expresiones creativas.
Entender la mente de un artista no es fácil, pues muchos de ellos traen las emociones exageradamente afloradas transitando rápidamente entre la alegría y la tristeza o la euforia y la depresión.
Su psiquismo es siempre la resultante de su mundo íntimo vibrante, lleno de recuerdos de las existencias pasadas o de las visiones sublimes que obtiene de los círculos de la vida espiritual a que mantienen contacto.
Para algunos espíritus que manifestaron su opinión eso ocurre porque el artista, de modo general, vive casi siempre más en la esfera espiritual que propiamente en el plano terrestre.
Los hombres de genio son inspirados, o sea, poseen un estímulo o lucidez repentina en la acepción trascendental de esa palabra.
La definición de la facultad mediúmnica que encontramos en la obra “Espíritus y Médiums” nos dice que:
“La mediumnidad es el poder que poseen ciertos seres de exteriorizar esos sentidos profundos del alma que en la mayoría de nosotros permanecen inactivos y velados durante la vida terrestre; es una manera de penetrar por anticipado en el Mundo de los Espíritus. La mediumnidad es, pues, por excelencia, la reveladora de las potencias del alma; es también, un resumen de nuestros modos de vida y de percepción en el Más Allá”.
El genio, es un médium. El buen artista puede ser un médium de las bellezas eternas, intermediarios y mensajeros del pensamiento superior. Su misión es imperativa. Por su intermedio los espíritus se manifiestan incitando la Humanidad a sensaciones elevadas. Así, cuando el artista consigue administrar su mundo íntimo, no dejándose conducir hacía los desarreglos morales, actúa como instrumento de la espiritualidad superior. Entonces él se transforma en verdadero artista, en la verdadera acepción de la palabra.
Debemos considerar que la mediumnidad es, en sí misma, una facultad neutra, pudiendo evidenciar manifestaciones superiores o inferiores. Se debe, pues, aplicar todos los cuidados y cautelas a las producciones mediúmnicas incluidas las artísticas. Las manifestaciones artísticas expresadas mediúmnicamente son tan diversas como las expresadas por el arte.
“… Sí, el espiritismo abre al arte un campo nuevo, inmenso e inexplorado aun, y cuando el artista reproduzca con convicción el mundo espiritual, tomará en semejante origen las más sublimes inspiraciones, y su nombre vivirá en los futuros siglos, porque a las preocupaciones materiales y efímeras de la vida presente, sustituirá el estudio de la vida futura y eterna del alma.” ,
encontramos esta afirmación que fue realizada por Allan Kardec en Obras Póstumas.
La mediumnidad puede ser clasificada en dos grupos principales:
Médiums de efectos físicos: Los que tienen el poder de provocar efectos materiales o manifestaciones ostensibles.
Médiums de efectos intelectuales: Los que son más especialmente aptos para recibir y transmitir comunicaciones inteligentes.
«Todas las demás variedades se relacionan más o menos directamente con una u otra de esas dos categorías, y algunas participan de ambas. Si analizamos los diferentes fenómenos producidos bajo la influencia mediúmnica, veremos que en todos ellos hay un efecto físico, y que a los efectos físicos se une casi siempre un efecto inteligente.»,
podemos leer en El Libro de los Médiums.
La naturaleza de las comunicaciones posee relación con la naturaleza del espíritu y refleja su evolución, superioridad o inferioridad, saber o ignorancia. Al mismo tiempo la aptitud del médium que sirve de instrumento al espíritu es muy importante.
Muy importante:
Esta facultad brinda muchas satisfacciones cuando el médium escucha únicamente a los buenos espíritus, o sólo a aquellos a quienes evoca. Pero no sucede lo mismo si un espíritu malo se obstina en mantenerse al lado de él y le obliga a escuchar a cada momento las cosas más desagradables, y en ocasiones las más inconvenientes.
Nos alerta Allan Kardec que la facultad mediúmnica no está relacionada con la elevación del médium y por eso puede ser utilizada por espíritus imperfectos y, sobre todo, por obsesores, causando gran sufrimiento al médium. Así, debe ponerse todo el cuidado para apartarlos de nuestra convivencia diaria, sea adoptando un derrotero de vida moralmente digno, además de buscar en el entendimiento del espiritismo para esclarecernos respecto a la actuación de esos hermanos perseguidores y de este modo ser un buen vehículo de transmisión de espíritus elevados.
Estudio en las manifestaciones mediúmnicas artísticas:
El espíritu comunicante y el médium deben poseer el conocimiento artístico necesario para visualizar la manifestación artística. Este conocimiento puede tener origen en una experiencia pretérita, en aprendizaje desarrollado en el plano espiritual o en adquisiciones obtenidas en la actual vida. Cuanto más profundo sea el conocimiento del espíritu y del médium en el tema mejor sintonía alcanzarán y más bellas obras producirán.
Los principales tipos de médiums para las manifestaciones artísticas:
1. Médiums pintores o dibujantes: son los que pintan o diseñan bajo la influencia de los espíritus. Hablamos de los que obtienen trabajos serios, ya que no se puede dar ese nombre a ciertos médiums que espíritus burlones lo llevan a hacer cosas grotescas, que despreciarían el más atrasado estudiante. La pintura realizada en estado de trance es llamada Psicopictoriografía.
Son características de la pintura mediúmnica no sólo la fidelidad e inconfundibles estilos peculiares a cada pintor-espíritu, permite que las entidades usen sus capacidades para sus creaciones propias. El médium puede realizar varios trabajos simultáneos, de escuelas distintas y, no es raramente, antagónicas entre sí.
Es de destaque las maneras no convencionales y la rapidez con que son producidas tales obras, no superando la vertiginosa fracción de segundos o minutos. Se realizan con o sin pinceles, con las manos o los pies, con los ojos abiertos o cerrados, en la oscuridad o en la luz.
Las pinturas mediúmnicas son una prueba evidente de la vida espiritual. Varios médiums pictóricos han podido ser instrumentos para grandes maestros de la pintura clásica y moderna, artistas como Vincent van Gogh, Leonardo da Vinci, Oscar Claude Monet, Paul Cézanne, Raffaello Sanzio, Eugène Henri Paul Gauguin entre otros, nos han dejado su legado reflejando sobre el lienzo su magistral obra.
Estas pinturas demuestran no solo el estilo del autor, sino que presenta el mismo uso del trazo, del color incluso la firma, no dejando así posibilidades de fraudes ni de dudas sobre quien ha sido el creador, escapando del médium cualquier posibilidad de emular o copiar estas características tan intimas asegurando así la originalidad de la obra.
Otra forma por la cual la mediumnidad pictórica puede manifestarse es la directa, caracterizada más como de efectos físicos. El dibujo o la pintura se «precipitan” en hojas de papel o telas guardadas en recipientes cerrados. Esta mediumnidad no deja de ser una variedad de la pneumatografía.
2. Médiums músicos: son los que ejecutan, componen o escriben músicas bajo la influencia de los espíritus. Hay médiums músicos mecánicos, semimecánicos, intuitivos e inspirados, como los hay igualmente para las comunicaciones literarias.
«Todo el mundo reconoce la influencia de la música sobre el alma y sobre su progreso. Pero, la razón de esa influencia es en general ignorada. Toda su explicación está en este hecho: que la armonía coloca al alma bajo el poder de un sentimiento que la desmaterializa.” La personalidad creativa.
3. Médiums de efectos musicales: provocan la ejecución de composiciones, en ciertos instrumentos de música, sin contacto con estos. Son muy raros. La diferencia entre médiums músicos y médiums de efectos musicales es que estos están clasificados en la de efectos físicos y los otros en la mediumnidad de efectos intelectuales.
4. Médiums historiadores: los que revelan aptitud especial para las explanaciones históricas. 5. Médiums versificadores: obtienen, más fácilmente que otros, comunicaciones en versos. Muy comunes, para malos versos; muy raros, para versos buenos.
6. Médiums Poetas: sin ser versificadas son más comunes, las comunicaciones que reciben tienen alguna cosa de vaporoso, de sentimental, propios para la expresión de sentimientos tiernos y afectuosos.
7. Médiums literatos: no presentan ni lo que hay de impreciso en los médiums poéticos ni la elevación de los médiums cuyas comunicaciones son nítidas y precisas; no obstante, disertan con sagacidad. Tienen el estilo correcto, elegante y, frecuentemente, de notable elocuencia.
8. Médiums auditivos: Los médiums auditivos representan una modalidad mediúmnica muy común, «oyen la voz de los espíritus. Es (…) algunas veces una voz interior, que se hace oír en el foro íntimo, otras veces, es una voz exterior, clara y elegante, cual la de una persona encarnada. Los médiums auditivos pueden, así, entablar conversación con los espíritus reconociendo inmediatamente la naturaleza de la voz. Quien no esté dotado de esa facultad puede, igualmente, comunicarse con un espíritu, sirviéndose de un médium auditivo, que desempeñe las funciones de intérprete.
La mediumnidad auditiva puede estar relacionada a la mediumnidad de videncia, es decir, generalmente quien ve espíritus también los oye. En verdad, el principio de la manifestación de ambas mediumnidades es bastante semejante: lo que las diferencia es el órgano de manifestación: oídos y ojos , respectivamente.
La historia registra un ejemplo notable de clariaudiencia, en la mediumnidad de Juana de Arco.
«La vida entera de la heroína está llena de apariciones y voces, siempre idénticas, y que jamás son desmentidas. En los valles de Domremy, en los campos de batalla, en presencia de sus acusadores de Poitiers y de los jueces de Ruano, por todas partes la asisten y la inspiran los espíritus. Sus voces le resonaban en los oídos, marcando su tarea cotidiana e imprimiendo a su vida una dirección precisa y un glorioso objetivo. Las voces anuncian acontecimientos que, sin excepción, se realizan. En su doloroso encarcelamiento, esas voces la animan y consuelan: -Lleva todo con paciencia; no te inquietes con tu martirio; llegarás por fin al reino del paraíso. Y los jueces, a quien ella comunica esos coloquios aparecen desasosegados con semejante predicción, cuyo sentido comprenden.”
Encontramos en El Libro de los Médiums:
«En ciertos médiums, el sentido psíquico puede coger las vibraciones más sutiles del pensamiento de los espíritus e incluso percibir las penetrantes armonías de los espacios y de los mundos, los conciertos de los espíritus celestes.”
Ludwig van Beethoven:
Se sentía rebosante de ondas de armonía provenientes de un foco de inspiración. Afirmaba tener necesidad de vivir sólo consigo mismo para sentir a Dios y a los ángeles más próximos a él, de su arte. Para ese gran excelso compositor «la música es el único acceso espiritual a las esferas superiores de la inteligencia.”
Wolfgang Amadeus Mozart:
La excelsitud de Mozart aparece en nuestros tiempos como uno de los más grandes genios musicales de la historia. Fue excelente fortepianista, violinista, organista y director. Los rasgos centrales del estilo clásico están todos presentes en la música de Mozart.
La claridad, el equilibrio, la fluidez, la voluptuosidad y la sensualidad son los sellos de su trabajo, pero cualquier noción simplista de su delicadeza enmascara el poder excepcional de sus obras maestras, tan exquisitas que es por el entendimiento de la mediumnidad que podemos encaminarnos hacia una comprensión de sus estructuras y hacernos una idea de su magnificencia.
En una de sus cartas escribe sobre la inspiración musical que recibe:
“Ustedes dicen que quisieran saber cuál es mi manera de componer y qué método sigo. Realmente no puedo decirles más que lo siguiente, pues yo mismo no sé nada y no me lo puedo explicar. Cuando estoy en buena disposición y completamente sólo durante mi paseo, los pensamientos musicales me llegan en abundancia. No sé de dónde vienen estos pensamientos, ni cómo llegan; mi voluntad no interviene para nada.”
En los Países Bajos a los nueve años compuso su primer oratorio Die Schuldigkeit des ersten Gebotes, y deslumbró tocando el órgano. Las capacidades del joven como intérprete pero sobretodo como compositor fueron excepcionales, sin embargo si tenemos en cuenta la mediumnidad este hecho se explica fácilmente. Afirmó Mozart:
“Ni la elevada inteligencia, ni la imaginación, ni ambas dos cosas en conjunto hacen al genio. ¡Amor!, ¡Amor!, ¡Amor!, He aquí el alma del genio.”
Relato de Mozart:
León Denis nos brinda con este relato de Mozart, los momentos próximos de su desencarnación: «En el declinar de su vida, cuando sobre él ya se extendía la sombra de la muerte, en un momento de calma, de perfecta serenidad, él llamó a uno de sus amigos que se hallaba en el cuarto:
«Escucha – dijo él – estoy oyendo música». El amigo le respondió: «No oigo nada.» Mozart, no obstante, tomado por encanto, continúa percibiendo las armonías celestes. Y su pálido semblante se ilumina. Cita después el testimonio de San Juan: «¡Y yo oí música en el cielo!”.
Ya en el lecho de muerte, antes de su desencarnación llamó a su habitación a uno de sus amigos y dijo : ‘Escucha’, le dijo, ‘¡Oigo música!’. Mozart, con el rostro iluminado a pesar de su palidez, seguía percibiendo aquella música celestial: ‘Ya oigo la música del cielo».
Sobre todo durante su última década Mozart explotó la armonía cromática hasta un extremo inusitado, con una notable seguridad y un gran efecto artístico
El último año de vida de Mozart, 1791, fue, hasta su enfermedad final, un tiempo de gran productividad y, en cierto sentido, un tiempo de recuperación personal. Realizó numerosas composiciones, incluyendo algunos de sus trabajos más admirados: la ópera La flauta mágica, Die Zauberflöte. Es un hecho probado que estaba mentalmente ocupado en la finalización de su Réquiemen, un acto febril que le impulsó a componer el inacabado Réquiemen en re menor, y luego murió a la edad de 35 años.
La Revista Espírita recoge en su número de mayo de 1859, un fragmento de una sonata autoría del espíritu Mozart, dictada a un médium de la Sociedad de Estudios Espíritas de París, Brion d’Orgeval.
Franz Ritter von Liszt:
Otro artista considerado un virtuoso del piano y cuyo psiquismo altamente desarrollado fue en seguida percibido por sus padres desde la más tierna edad, fue el compositor húngaro Franz Ritter von Liszt.
Su legado fue un valioso patrimonio musical que con apenas cuatro años de edad ya ejecutaba al piano obras clásicas de conocidos autores. Afirmaba dialogar con amigos espirituales que le narraban pasajes de la pasión de Cristo y que lo estimulaban al estudio musical, se despertaba por las noches, entraba en trance y mantenía conversaciones con ellos donde afirmaba recibir consejos y orientaciones.
En una carta que escribió a Peter Wolf, manifestó:
“La casa del Abab exhala mucha energía, y en aquel ambiente me veo rodeado por almas bienhechoras tales como Homero, Platón, Locke, Bach, Mozart y otros cuyos pensamientos se confunden con los míos. Así, queriendo traducir la grandeza de los momentos de éxtasis, escribí el Pensamiento sobre los Muertos.”
Además de Mozart, Beethoven y Liszt, otros músicos como Frédéric Chopin, Georg Friedrich Händel, Richard Wagner, Johann Sebastian Bach fueron médiums y han dejado la sutileza y la belleza del mundo invisible.
Johann Wolfgang von Goethe
Ha dejado un patrimonio que abarca géneros como la poesía lírica, el drama, la novela e incluso controvertidos tratados científicos, siendo incalculable la influencia dejada en la filosofía alemana. Es al día de hoy una constante fuente de inspiración para todo tipo de obras.
Dijo: “Yo, a veces, corría a mi escritorio sin molestarme en enderezar una hoja de papel que estaba torcida, y escribía mi obra en verso de principio hasta el final al sesgo, sin moverme. A este efecto tomaba de preferencia un lápiz, que se presta mejor a trazar los caracteres, pues a veces podría haber despertado de mi poesía de sonámbulo, o distraído por el chillido de la pluma, y ahogar en su nacimiento una pequeña producción.”
En la literatura podemos citar a otros prolijos y fecundos escritores como Teresa de Jesús, Víctor Hugo, William Shakespeare, John Milton, Alphonse de Lamartine, que con su forma elegante y con corrección deleitaron, conmovieron. Ellos han declarado que la inspiración les venía del mundo espiritual, que experimentaron el proceso mediúmnico que les propiciaba la comunicación con el mundo espiritual, todos ellos fueron vehementes defensores de la relación con el Más Allá.
Gustavo Adolfo Bécquer, poeta y narrador español dijo: “El espectáculo de lo bello, en cualquier forma en que se presente, levanta la mente a nobles aspiraciones.”
El novelista francés André Maurois manifestó:
“Cuando las cosas no van bien, nada como cerrar los ojos y evocar internamente una obra bella.”
Afirmó el novelista J. A. Livraga:
“Arte no es otra cosa que la taumaturgia de hacer aparecer ante los sentidos lo que el artista percibe con otros sentidos en dimensiones armónicas y terribles. El genio pule aristas, redondea las cosas para hacerlas adaptables a los ojos de los humanos de manos frágiles, ojos pequeños y oídos limitados. Es el “Puente de Oro” entre los Arquetipos de la Belleza y muestras miserias humanas, doradas súbitamente por la luz de las musas.”
“Arte, verdaderamente Arte, es aquella belleza, armonía pura, que ilumina y eleva, haciendo vibrar lo mejor de nosotros. Todo aquello que exalta las bajas pasiones, la arritmia, la violencia y la ignorante desesperación, no es Arte.”
“El Arte no es el contacto con lo de abajo sino con lo de arriba.”
“El acceso permanente a los mundos estéticos es privativo de las almas estéticas.”
Georg Wilhelm Friedrich Hegel filósofo alemán.
“El arte es el que nos ofrece apreciaciones de las formas universales, haciéndolas aparentes y sensibles.»
“Lo que buscamos en el arte lo mismo que en el pensamiento, es la verdad.”
“El hombre se ha servido siempre del arte como un medio para tener conciencia de las ideas e intereses más sublimes de su espíritu. Los pueblos han depositado sus concepciones más elevadas en las producciones del arte, las han manifestado y han tomado conciencia de ellas por medio del arte. La Sabiduría y la Religión están concretadas en las formas creadas por el arte, quien nos ha entregado la clave gracias a la cual estamos en condiciones de comprender la sabiduría y la religión de muchos pueblos.”
“Despertar el alma: tal es, según dice, el objetivo final del arte… su objetivo consiste en revelar al alma toda lo que encierra de esencial, grande, sublime, respetable y verdadero.”
Espiritismo:
El espiritismo viene a revelar otra categoría mucho más perniciosa de espíritus embusteros hipócritas, orgullosos y pretendidos sabios que toman nombres venerados para aportar ideas a menudo muy extravagantes y absurdas. Antes de que las relaciones mediúmnicas fuesen conocidas, ejercían su acción de un modo menos ostensible, por la inspiración, la mediumnidad inconsciente, auditiva o parlante.
El arte es en conclusión una herramienta de educación y progreso del espíritu y vehículo de divulgación de las verdades espirituales. El conocimiento de la realidad espiritual ofrece un abanico inmenso de posibilidades creadoras a los artistas que buscan bañarse en este mar de recursos nos dice Allan Kardec en Obras Póstumas.
Los hombres de genio han vivido en todas las épocas y han dejado su herencia, magníficas obras literarias que exteriorizan la fertilidad de su inteligencia o sentimientos.
Pertenecientes a diferentes escuelas y disciplinas estos artistas reflejan a sabiendas o no sus vivencias espirituales tornándose verdaderos cronistas del mundo invisible del cual extraen sus inspiraciones.
Ejemplo de ello son el abanico de diferentes manifestaciones de artes reflejadas en los pintores, los músicos, los escritores, los poetas, los actores que dejaron una profunda huella en importantes pensadores y artistas posteriores, muchos de ellos médiums conscientes o inconscientes que en distintos grados se relacionan con el Más Allá.
La belleza es un atributo divino. Dios puso en los seres y en las cosas este encanto misterioso que nos atrae, nos seduce nos cautiva y llena el alma de admiración El arte es la búsqueda, el estudio, la manifestación de esta belleza eterna, nos aclara León Denis en el libro El Espiritismo en el arte .
Además explica que la fusión del bien con lo bello es el objetivo sublime de la Creación:
«La ley eterna del Universo, el objetivo sublime de la Creación, es la fusión del bien con lo bello. Esos dos principios son inseparables, ellos inspiran toda la obra divina y constituyen la base esencial de las armonías del Cosmos. El pensamiento y la intención divinas siendo el bien, la manifestación de ellos es lo bello. En su elevación, el ser deberá más y más compenetrar-se de este pensamiento soberano, de esa voluntad y dedicar a cumplirlos en si e a su alrededor, bajo formas siempre más perfectas. Su felicidad consistirá en asimilar esa ley y en cumplirla.»
Cláudia Bernardes de Carvalho
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Bibliografía:
Denis, L., El problema del ser y del destino.
Kardec, A., El Libro de los Espíritus.
Kardec, A., El Libro de los Médiums.
Kardec, A., La Génesis, los milagros y las predicciones según el espiritismo.
Kardec, A.,Obras Póstumas.
Denis, L., Espíritus y Médiums.
Denis, L., El Espiritismo en el arte.
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