Goethe y el espiritismo
Johann Wolfgang von Goethe, nació en Alemania en la ciudad de Frankfurt am Main en 1749 y desencarnó en Weimar en 1832.
Fue un prolífico escritor, poeta, novelista, filósofo. Su obra abarca géneros variados como la poesía lírica y las novelas, también las obras de teatro. Incluso realizó un libro autobiográfico, Dichtung und Wahrheit – Poesía y verdad.
Algunas de las principales obras de Goethe incluyen temas como desafíos morales y emocionales, el deseo humano, la ambición, la búsqueda del sentido de la vida. por esto es considerado uno de los más grandes de la historia de la literatura mundial por su capacidad para explorar las complejidades del alma humana.
Sus intereses más allá de la literatura abarcaron diversos campos científicos como la botánica, la geología y la óptica, entre otros. Estas reflexiones filosóficas del arte, de la naturaleza y de la vida mostraron un enfoque y su aprecio por la belleza de la obra de la naturaleza influyeron en su escritura y su visión del mundo.
Ocupó también cargos públicos en la administración del gobierno de Weimar, lugar donde en el tránsito de los siglos XVIII al XIX había triunfado el movimiento artístico y literario de corte neoclásico fomentado por Goethe.
Sus contribuciones a la literatura alemana y mundial lo convierten en una figura influyente y respetada en la historia de la cultura europea.
Hoy día el Intituto Goethe, entidad que promueve el habla y cultura alemanas lleva su nombre por todo el mundo.
Dejó un legado duradero y su obra sigue siendo ampliamente estudiada y admirada en la actualidad.
Las penas del joven Werther
Lo que nos llama la atención es la obra Die Leiden des jungen Werthers – Las penas del joven Werther.
Esta es una de las novelas epistolares más influyentes de la literatura alemana considera una de las obras fundadoras del movimiento literario del Romanticismo y publicada por primera vez en 1774. Explora temas como el amor no correspondido, la desesperación, el aislamiento y el deseo de una vida más auténtica. Se caracteriza por su estilo emotivo y su capacidad para explorar los sentimientos más profundos del ser humano. A través de la voz de Werther, el autor reflexiona sobre la naturaleza humana y los dilemas emocionales universales.
La novela está compuesta por una serie de cartas escritas por el personaje principal, Werther, a su amigo Wilhelm, en las que narra sus pensamientos, emociones y experiencias.
La historia se centra en Werther, un joven sensible, que despierta el interés de las jóvenes de su círculo.
Sin embargo, se enamora profundamente en un baile de una muchacha llamada Charlotte, cuyo apodo cariñoso era Lotte.
Ella está comprometida con Albert, por convencionalismos sociales no es recíproca a las solicitudes de Werther, a pesar del intenso sufrimiento que le causa el amor no correspondido, Werther desarrolla junto a Lotte una íntima amistad. A medida que Werther profundiza en su amor no correspondido por Lotte, experimenta un vehemente conflicto emocional y se sumerge en una profunda melancolía.
Deja el pueblo Wahlheim para dirigirse a otra ciudad Weimar, con el fin de olvidarla. Tiempo después regresa y constata que la pareja se había casado, lo que le provoca un gran sufrimiento. Sin embargo, sigue visitándola. Por respeto a su esposo y pena por Werther, Lotte decide no aceptar más estas visitas.
La última vez que se encuentran Werther le recita un pasaje de Ossian y ambos se besan.
Lotte se encierra en una habitación y pide a Werther que se vaya para siempre.
Werther es consciente que uno de los tres, Albert, Lotte o él, devería morir.
Incapaz de hacerle daño a otro ser humano, Werther no encuentra otra opción que el suicidio.
Escribe a Albert una carta de despedida pidiéndole dos pistolas con la excusa de que las necesitaba para un viaje. Albert recibe esta petición en presencia de Lotte, a quien le pide que le mande las pistolas. Lotte, accede, aunque nerviosa, pues sabe que Werther es capaz de suicidarse.
Werther comete suicidio en el momento en el que suenan las campanas de medianoche en la iglesia de Wahlheim.
El desenlace de esta obra es el suicidio del joven por un amor no correspondido.
El impresionante impacto que este libro causó en la sociedad de su época fue enorme y provocó una moda conocida como el Wertherismo, en la que jóvenes admiradores imitaban el estilo y la apariencia del protagonista, llegando incluso a copiar su trágica decisión.
Aunque Werther representa el idealismo y la sensibilidad romántica, su tragedia advierte acerca la falta de control sobre los sentimientos.
Las penas del joven Werther sigue siendo una obra relevante y leída en la actualidad. Ha sido traducida a varios idiomas y se ha hecho incluso una película con el mismo nombre. Ha dejado una marca perdurable en la cultura literaria y artística sindo considerada un clásico de la literatura mundial.
Paralelismo
Goethe se inspiró en su propia historia y la de un amigo para escribir este libro, pues se enamoró de una chica llamada Charlotte Buff que estaba comprometida con un señor mayor Johann C. Kestner. Utilizó en su libro la misma fecha de su enamoramiento y de su cumpleaños. Su amigo Karl se suicidó con pistolas tal como escribió el fin de Werther en su libro.
Habiendo escrito Werther cuando tenía apenas veinticuatro años, fue su obra más popular. Muchos solo le conocían por esta novela entre todas las que escribió. El famoso autor guardó las distancias con el pasar de los años con esta obra. Se arrepintió de haberla escrito. Lamentó su fama y haber hecho público su amor juvenil a Charlotte Buff.
Reconoció el gran impacto emocional y personal que promovían sus narraciones en los jóvenes enamorados y deprimidos.
En 1821, le comentó a su secretario que:
«Debe de ser malo, si no todos tienen un momento en su vida en el que sientan que Werther ha sido escrito solo para ellos».
Todo este resumen os ofrezco para que podáis entender la comunicación dada a la Sociedad Parisiense de Estudios Espíritas en el día 25 de marzo de 1859, veintisiete años después de su desencarnación.
Comunicación
Evocación. Estoy con vosotros.
¿En qué situación estáis como Espíritu: errante o reencarnado? Errante.
¿Sois más feliz que cuando estabais encarnado? Sí, porque estoy liberado de mi cuerpo grosero, y veo lo que antes no podía ver.
Me parece que cuando encarnado no teníais una situación infeliz; ¿en qué consiste la superioridad de vuestra actual situación? Acabo de decirlo; vosotros, adeptos del Espiritismo, debéis comprender esa situación.
¿Cuál es vuestra opinión actual sobre Fausto? Es una obra que tenía como objetivo mostrar la vanidad y el vacío de la Ciencia humana y, por otro lado, exaltar el sentimiento del amor, en aquello que había de bello y puro, castigándolo en lo que tenía de desenfrenado y de malo.
¿Ha sido por una cierta intuición del Espiritismo que habéis descrito la influencia de los Espíritus malos sobre el hombre? ¿Cómo habéis sido llevado a hacer esta descripción? Yo tenía el recuerdo casi exacto de un mundo donde veía ejercer la influencia de los Espíritus sobre los seres materiales.
¿Teníais entonces el recuerdo una existencia precedente? Sí, ciertamente.
¿Podríais decirnos si esta existencia tuvo lugar en la Tierra? No, porque aquí no se ven a los Espíritus en acción; ha sido realmente en otro mundo.
Pero entonces, ya que en ese mundo podíais ver a los Espíritus en acción, debía ser un mundo superior a la Tierra. ¿Cómo es que habéis venido de un mundo superior a un mundo inferior? ¿Habéis decaído? Tened a bien explicarnos esto. Era un mundo superior hasta un cierto punto, pero no como lo entendéis. Todos los mundos no tienen la misma organización, sin que por esto sean de una gran superioridad. Además, sabéis bien que yo cumplía entre vosotros una misión que no podéis disimular, ya que aún representáis mis obras; no hubo decaimiento, puesto que he servido y aún sirvo para vuestra moralización. Yo aplicaba lo que podía tener de superior en aquel mundo precedente para castigar las pasiones de mis héroes.
Sí, vuestras obras aún son representadas. Inclusive, vuestro drama Fausto acaba de ser adaptado para ópera. ¿Habéis asistido a esta presentación? Sí.
¿Podéis darnos vuestra opinión sobre la manera por la cual el Sr. Gounod ha interpretado vuestro pensamiento a través de la música? Gounod me ha evocado sin saberlo. Me ha comprendido muy bien; yo no lo habría hecho mejor como músico alemán; tal vez él piense como músico francés.
¿Qué pensáis de Werther? Hoy repruebo su desenlace.
¿Esta obra no hizo mucho mal al exaltar las pasiones? Hizo mucho mal y causó desgracias.
La misma ha causado muchos suicidios; ¿sois responsable por esto? Es por eso que aún sufro, puesto que hubo una influencia infeliz esparcida por mí, de lo que me arrepiento.
Me parece que cuando encarnado teníais una gran antipatía por los franceses; ¿sucede lo mismo actualmente? Soy muy patriota.
¿Estáis aún vinculado a un país más que a otro? Amo a Alemania por sus pensamientos y por sus costumbres casi patriarcales.
¿Quisierais darnos vuestra opinión sobre Schiller? Somos hermanos por el Espíritu y por las misiones. Schiller tenía una noble y gran alma: sus obras son el reflejo de la misma; él ha hecho menos mal que yo.
Es bien superior a mí, porque era más simple y más verdadero.
¿Podríais darnos vuestra opinión sobre los poetas franceses en general, comparados con los poetas alemanes? De ninguna manera se trata de un vano sentimiento de curiosidad, sino que es para nuestra instrucción. Confiamos que vuestros elevados sentimientos nos eximirán de la necesidad de pediros que lo hagáis sin parcialidad, dejando a un lado todo prejuicio nacional. Sois muy curiosos, pero voy a satisfaceros: Los franceses modernos hacen frecuentemente bellos poemas, pero usan más palabras bonitas que buenos pensamientos; ellos deberían vincularse más al corazón que a la mente. Hablo en general, pero hago ciertas excepciones a favor de algunos: un gran poeta pobre, entre otros.
Un nombre circula en voz baja en la asamblea; ¿es a él a quien os referís? Pobre, o que parece.
Estaríamos contentos en obtener de vos una disertación sobre un tema de vuestra elección, para nuestra instrucción. ¿Tendríais la bondad de dictarnos algo? Lo haré más tarde y a través de otros médiums; evocadme en otra ocasión.
Como podemos observar, Goethe se arrepiente de todo el mal causado, ya que indujo de cierta forma a los jóvenes más débiles a cometer suicidio por un amor frustrado.
El espiritismo habla sobre el suicidio
Podemos encontrar en el Libro de los Espíritus, en las preguntas 943 a 957, un diálogo de Kardec con el Espíritu de Verdad.
Nos dice:
¿Tiene el hombre el derecho de disponer de su propia vida? No: tan sólo a Dios cabe el derecho de disponer de la vida del hombre. El suicidio voluntario constituye una transgresión a esa ley.
Los que han conducido a un infortunado a ese acto de desesperación que es el suicidio, ¿sufrirán las consecuencias de lo que hicieron? ¡Desgraciados de ellos!, porque de eso responderán como de un asesinato.
En el Evangelio según el Espiritismo, en el Capítulo V, vemos que el materialismo distorsiona la visión de los problemas, llevando a las salidas fáciles del suicidio.
El suicidio es considerado una de las mayores infracciones a la Ley Divina. Aquel que la induce, provoca o ejecuta deberá expiar las terribles consecuencias de este acto.
El suicidio causa desequilibrio y mucho sufrimiento. Es una infracción a las Leyes de Dios. Además, el espiritismo advierte de la continuidad de la vida después de la muerte y, por lo tanto, el infractor deberá rescatar esta falta sufriendo sus consecuencias en el más allá.
Un espíritu suicida deberá volver a encarnar para pasar por la misma situación o por una situación muy similar y tiene como prueba añadida superar las tendencias reiteractivas de suicidio.
¿Por qué se comete suicidio?
Los motivos del suicidio pueden ser varios, como los derivados del descontento, las decepciones, la sensación de soledad, la ociosidad, la vulnerabilidad, las dificultades, la depresión.
El sujeto puede pasar por apuros derivados de su mala actuación en la vida actual, que pueden generar una situación en que la persona no encuentra salida. Es un acto de fuga de la realidad a que se enfrentan.
Sin embargo, hay en todas las personas la voz de la conciencia, estas sensaciones, estos sufrimientos o eventos adversos que pueden ser generados por una mala actuación en la vida actual, son derivados de la falta de confianza en Dios y en la vida futura.
Recuerde que cada persona elije sus pruebas, algunas pruebas son rescates de errores del pasado y otras de esta misma encarnación.
Indudablemente hay suicidios cometidos fuera del imperio de la razón, por embriaguez, delirio, que tienen menos responsabilidad que los suicidios voluntarios. En este caso el grado de culpabilidad es menor, nos enseñan los buenos espíritus.
En la Revista Espírita de 1861, Allan Kardec publicó el testimonio de un espíritu suicida, bajo el título de El suicidio de un ateo, recomendamos su lectura.
Analizando varios testimonios espirituales descritos por suicidas observamos una connotación común: todos muestran terribles consecuencias por esta acción. Los espíritus suicidas producen un discurso por medio del cual vinculan sentimientos acerca de objetos discursivos como el sufrimiento, el arrepenitmiento, el remordimiento, la inmortalidad del alma, el resgate de la infracción, el tratamiento espiritual a la que deben pasar y la exhortación de la vida. Deben pasar un tiempo indispensable para su reequilibrio y reeducación en compañía de espíritus afines antes de volver a encarnar.
¿Cómo resistir a este pensamiento?
Con la oración, pidiendo a Dios la asistencia de los buenos espíritus, dando con ello el primer paso de valor para superar las adversidades. Nadie está solo, estamos rodeados por espíritus encarnados y desencarnados, vendrá la asistencia. Sin embargo, uno debe cambiar de pensamientos, buscar soluciones, intentar salir de esta situación.
Con el cambio de actitud, buscando ocupar el tiempo con buenas acciones hacia el prójimo, hacía a uno mismo, procurando crecer espiritualmente.
El suicidio es un acto de violencia contra uno mismo
La culminación de una serie de factores que lleva a que la persona termine voluntariamente con la vida en una acción trágica es el suicidio. Este acareará una serie de sufrimiento en la vida espiritual, que deberán ser rescatados.
Es por este motivo que Goethe, contesta por medio de un médium que sufre, porque influyó negativamente en muchas personas. Se arrepinte tanto en vida como en el mundo invisible ya que con mayor lucidez espiritual se percata de su responsabilidad frente a todos aquellos que inspirados por su letra hayan cometido tal infracción.
Cláudia Bernardes de Carvalho
© Copyright 2023 Cláudia Bernardes de Carvalho
Todos los derechos reservados
Bibliografía
Revista Espírita de 1859.
Revista Espítita de 1861.
Kardec, A. El Libro de los Espíritus
Comentarios recientes